Desde pequeños, las personas aprenden la importancia de la higiene para mantener un entorno sano y en armonía. Cuando se trata de higiene del agua, un líquido vital y por ello indispensable para prácticamente todo: lavar, cultivar comestibles, y por supuesto, para beber.
El agua nos ayuda de incontables maneras; nos hidrata, nos repone y contribuye a eliminar las toxinas del cuerpo. Pero, cuando este líquido se consume de forma impura puede dar lugar a muchas enfermedades.
El agua es la mejor plataforma para que los gérmenes y las bacterias crezcan y se multipliquen. Cuando el agua se almacena en un tanque sucio, su calidad puede deteriorarse hasta convertirse en el ambiente perfecto para cultivar varias enfermedades, incluidas el cólera y la tifoidea. Si el tanque de agua no se limpia con frecuencia, el líquido puede contaminarse con mucha facilidad, haciéndola peligrosa para el consumo.
Sabiendo esto, y tomando en cuenta que un tinaco o depósito de agua es propenso a albergar el desarrollo de gérmenes y bacterias, resulta esencial mantenerlo limpio en todo momento, y así garantizar el acceso a un agua segura y saludable.
Esta es la principal razón para hacerlo, pero sí aún con esto necesitas otros motivos para cuidar el estado en el que se encuentra tu depósito, o simplemente deseas mayor información sobre los beneficios de mantener la buena higiene de tu tinaco, checa esto:
Beneficios en la salud de la piel y cabello: El agua limpia no sólo es esencial para la salud de los órganos internos del cuerpo humano; también tiene impacto en el aspecto exterior. Cuando tomas una ducha, tu piel absorbe todos los químicos a los que está expuesta, así que la presencia de cualquier químico o sustancia dañina en el agua puede causar irritación o daño permanente en tu piel y cabello.
Adiós malos olores: Un tinaco de agua sucio puede hacer que el líquido que contiene expida malos olores, los cuales son un indicador de que el agua está contaminada y de que el tanque necesita limpieza. Cuando esto ocurre es necesario buscar ayuda de un profesional en limpieza de tinacos, para erradicar por completo esta situación desagradable y los riesgos a la salud que implica.
Complementa la acción del filtro de agua: A pesar de la implementación de unidades de filtración de agua, es posible que dichos filtros no sean capaces de eliminar el 100% de todos los gérmenes y bacterias que pueden desarrollarse en el tinaco. Es por eso que resulta esencial llevar a cabo una limpieza profunda de la parte interna del tinaco por lo menos dos veces cada año.
Adiós a la acumulación de suciedad: El tinaco puede acumular suciedad con mucha facilidad. debido al ambiente húmedo que preserva. Realizar una limpieza periódica de este depósito evita la acumulación de suciedad e impurezas que pueden causar daños en la salud de quienes consumen el agua almacenada, además de facilitar las futuras limpiezas. Al mismo tiempo, estas prácticas disminuyen los riesgos de acumulación de sedimentos, de corrosión del tanque y de daños a la estructura del tinaco.
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